martes, 13 de diciembre de 2016

Actividades página 21

Apartado G. Busca artículos en Internet a favor o en contra del sexismo del lenguaje


En los pasados Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro, Jorge Dueñas, el entrenador de la selección femenina española de balonmano, sorprendía al realizar sus declaraciones en televisión después de cualquier partido. A cada paso, con una voz varonil de aúpa, soltaba: “Nosotras…”. Se trataba de una situación natural, aunque lingüísticamente extraña. En los ámbitos donde existe una mayoría preponderante de mujeres, ¿conviene seguir utilizando el masculino?
Dentro de su contexto, Dueñas y otros muchos entrenadores, ante sus chicas, se diluyen en un pronombre femenino. Es una de las cuestiones que desde hace años preocupa de una manera creciente en la Real Academia Española (RAE), donde las tendencias sociales y políticas partidarias de eliminar lo que consideran un uso sexista del lenguaje ponen en jaque la estructura del idioma.

No es que quite el sueño este caso específico, si no que en aras de una corrección política o de apoyar a colectivos que dicen sentirse discriminados, se propongan usos de género diferenciados: compañeros y compañeras; candidatos y candidatas... La cuestión entre los académicos es candente: ¿deben entrar como institución en una creciente tendencia pública alimentada por movimientos políticos y sociales o deben mantenerse al margen?
Hace cuatro años, el lingüista y académico Ignacio Bosque publicó un informe, firmado por todos los miembros de la RAE, titulado Sexismo lingüístico y visibilidad de la mujer. Desde entonces, el debate no ha cesado. En la calle, en las instituciones y, dicen, en menor intensidad pero a veces con virulencia, dentro de la misma institución. Un artículo firmado por el escritor y también académico Arturo Pérez-Reverte el 2 de octubre en su sección Patente de Corso, del XL Semanal, lo ponía de manifiesto e invitaba a no permanecer pasivos ante las peticiones “de amparo ante unas normas que pueden obligar a los profesores, en clase, a utilizar el ridículo desdoblamiento de género”.
Le respondió en una carta abierta un compañero de la institución, el filólogo Juan Gil, quien le dijo que la RAE no es “el Constitucional” y no puede dar “amparo a nadie”. “La cuestión que se debate es política, y la respuesta, si es que se le debe dar respuesta, debe ser asimismo política”, añadía.
Frente a quienes desean llevar la discusión al campo de la esfera pública están los que se centran en un debate lingüístico. Bosque insiste: “Con el pasado informe queríamos dejar clara nuestra postura, pero sabíamos perfectamente que no se resolvería el asunto. Más cuando algunos se empeñan en llevarlo al plano político. Simplemente digo que, antes de pasar al mismo, antes de saber en qué campos o situaciones se producen discursos sexistas frente a los que todos estamos en contra, por supuesto, hay que entrar en los detalles lingüísticos”.

Para empezar, la estructura de las lenguas románicas. Todas utilizan el masculino plural como genérico para ambos sexos. Por motivos atávicos, patriarcales, antropológicos… Los que se quieran esgrimir, pero así es. ¿A qué precio se puede cambiar ese uso que se ha convertido desde hace siglos en natural? A un precio político, creen muchos de los que observan con preocupación que se quiera revertir de una forma impuesta y un tanto artificial. “Va a ser imposible. Si alguien intenta así forzar la lengua está abocado al fracaso”, advierte Pedro Álvarez de Miranda, miembro de la RAE, filólogo, lexicógrafo y catedrático de la Autónoma de Madrid.

El debate dentro de la academia se centra en responder ante ciertas iniciativas públicas –sobre todo una promovida por la Junta de Andalucía en varios ámbitos— enviando cartas de recomendación o no ante determinadas propuestas. Pero entre sus miembros existen diferentes sensibilidades, dentro del consenso que supuso el informe elaborado por Bosque. Aunque no existan discrepancias dramáticas, apuntan, sí se presentan matices.

APARTADO H. INDAGA EN LA LENGUA ESPAÑOLA Y EXTRAE TÉRMINOS QUE TE PAREZCAN SEXISTAS

Cuando por ejemplo se dice los ciudadanos, los estudiantes, los alumnos, los políticos todos estos designan grupos formados por hombres y mujeres pero se utiliza el masculino para nombrarlos

APARTADO I. ELABORA UN BREVE TEXTO PERSONAL SOBRE SI CREES QUE EL LENGUAJE ES O NO SEXISTA

En mi opinión pienso que el lenguaje no es sexista , aunque hay algunas personas que opinan que lo es solo por usar algunas palabras en masculino que integran a mujeres y viceversa. Yo lo veo como algo normal, tampoco algo alarmante, algunas personas se sienten ofendidas con algunas palabras que consideran como subrayando las desigualdades entre hombres y mujeres, pero es algo tan obsoleto que no deberíamos ni prestarle atención.

APARTADO J. BUSCA UN ANUNCIO PUBLICITARIO EN EL QUE SE UTILICE EL LENGUAJE DE FORMA SEXISTA.



Resultado de imagen de anuncios con lenguaje sexista


domingo, 16 de octubre de 2016

Comentario crítico

En mi opinión pienso que en el fútbol no es que haya miedo a decir que algún jugador, sino que pienso que es verdad que no hay futbolistas gais, aunque estoy un poco de acuerdo con que los pocos que puede haber tengan un poco de miedo a decirlo ya que la sociedad no es tolerante con este tipo de personas y podrían llegar hasta perder el trabajo, cuando hablamos de algunos aspectos como la homofobia siempre decimos que no existe que somos una sociedad tolerante pero es totalmente incierto ya que existe en muchos sitios, otro aspecto en el que siempre dicen que ya hemos evolucionado es en la igualdad entre hombres y mujeres, lo cual es incierto tambien ya que existen todavía grandes desigualdades entre los géneros, por ejemplo un hombre y una mujer ocupando el mismo puesto de trabajo y cumpliendo las mismas tareas, cobra más el hombre que la mujer ¿por qué? ¿a esto llamamos igualdad entre hombres y mujeres?. Me parece un poco decepcionante esto que he dicho y algunas personas siguen insistiendo en que las tratamos igual que los hombres pero no es así, por lo que deberiamos ser un poco más solidarios ponernos en su lugar y tratar de solucionarlo

sábado, 15 de octubre de 2016

Texto inductivo

A lo largo de la enseñanza imponen hacer exámenes, aunque yo pienso que no se deberían hacer.

Cuando ponen exámenes, la mayoría de alumnos memorizan dos dias antes del exámen la materia, por lo que no aprenden nada de lengua, en cambio si la nota de la asignatura dependiese de actuaciones en teatro, elaboración de resumenes, leer libros, es decir que la nota dependiese exclusivamente del trabajo diario por lo que se aprendería muchísimo más de una forma más didáctica. En algunos temas es más importante una prueba oral ya que un exámen no puede valorar la expresión oral. Además, si una persona sabe de la materia y el dia del exámen haya tenido un mal día por cualquier circunstancia y suspende, eso no quiere decir que no sepa de la materia .



En conclusión, personalmente estoy más a favor del trabajo diario que de los exámenes puntuales para evaluar la asignatura de lengua, ya que está demostrado que con lo que más se aprende es con el trabajo diario.